miércoles, 28 de marzo de 2012

Mi discurso del método

Pienso, luego, me despisto. Y eso a pesar del esfuerzo. Toda mi vida, siento no ser demasiado original, ha sido un intento desesperado por alcanzar la felicidad. He probado el amor, las drogas, el arte, la espiritualidad, los placeres m ás terrenales. Nada dura demasiado. Aquello que parecía tan importante y tan valioso parece olvidársenos todo el rato.
Paraíso perdido, perdido por buscarte...(una de mis citas preferidas).
¿Qué es el método? Tratar de repetir el modelo que nos llevó hasta aquel paraíso. Somos adictos a esas sensaciones y olvidamos que la verdadera liberatd es espontánea, impredecible, indomable desde el método y sin embargo insistimos, porque...
Pienso, luego insisto. No hace falta ser un obsesivo de primera categoría como yo para darse cuenta de que la estructura mental tiende a la repetición, fórmulas desgastadas ya, conjuros inútiles contra el miedo que a pesar de todo repetimos como un mantra inconsciente. Insistimos en los recuerdos agradables y en los desagradables, en los hábitos y las ideologías, dejamos de ver como son las cosas en realidad porque preferimos amoldarnos (moldes, patrones, métodos) a la idea que tenemos de ellas.
Pienso, luego me resisto. A todo lo que tengo etiquetado como malo, poco ético, inapropiado, inmoral. Todo aquello contra lo que lucho se engrandece, como dice Kafka una de las armas más poderosas del mal es la invitación a la lucha, porque lo que oponemos se resalta, nos invade y se hace más poderoso. Sólo aquello que se acepta deja de debilitarnos.
¿Es pensar existir? ¿Es el pensamiento, como dicen muchas escuelas, germen de todos los males? ¿Acaso no existen contrarios más poderosos de la lucidez y la conciencia que el despiste, la obsesión y la resistencia? ¿No es la alternativa el origen del dualismo?
Hay días que no puedo evitar sentirme denso.

martes, 27 de marzo de 2012

Película de la semana: Eva

Cuando terminé de ver esta película pensé, si fuera americana todo el mundo habría hablado de ella muchísimo más, y es que buena parte del cine español se centra en tópicos desgastados e inútiles, pero existen productos de gran calidad como esta película del debutante Kike Maíllo que tanto nos sorprendió en la gala de los Oscar.



La película está ambientada en una época futura en la que existen programadores y creadores de robots y precisamente el leitmotiv es ese la creación de un niño con sentimientos humanos. Sí, evidentemente el tema ya ha sido tratado en Blade Runner pero aún así la película merece la pena y mucho.

Es cierto que la ambientación deja un poco que desear porque resulta un poco inverosimil que una socidad tan avanzada en la robótica apenas tenga diferencias con la nuestra: los mismos coches, el mismo tipo de viviendas y estética... Evidentemente es una limitación propia de los recursos de la producción pero en descargo hay que decir que los recursos de la película están perfectamente aprovechados y que los efectos especiales, son escasos sí, pero están muy bien.

En cualquier caso el punto fuerte de la película es el guión y las interpretaciones, la niña está estupenda y Daniel Bruhl también. Lluis Homar es sin gastarse apenas un euro, uno de los robots más entrañables de la historia del cine. La trama amorosa está algo acelerada a veces y un poco confusa, pero la película es más que interesante.

Sin querer destripar nada simplemente diré que el final es absolutamente maravilloso, una preciosidad que está a la altura del mejor cine de todos los tiempos, una mezcla perfecta de inteligencia y emoción.

A disfrutarla

viernes, 23 de marzo de 2012

Breaking Bad - 3 temporada

Me faltan dos episodios de la tercera temporada de Breaking bad, pero ya, aún sin saber el desenlace me atrevo a decir que es la mejor de las tres que he visto con diferencia. La temporada comienza con varios planteamientos que se irán desarrollando en los sucesivos capítulos:

- Dos peligrosísimos sicarios mexicanos van en busca de Walt White para asesinarlo.
- Skyler decide divorciarse de Walt al enterarse de que se dedica al negocio de la metanfetamina.
- Hank Schrader está muy cerca de dar con la pista que le lleve hasta el escurridizo y enigmático Heisenberg.
- Jesse Pinkman se encuentra rehabilitándose de su adicción a la metanfetamina.
- El "dueño" de "pollos" quiere continuar haciendo negocios con nuestro protagonista.


A partir de estas directrices el equipo de guionistas han tejido una trama absolutamente maravillosa: los momentos de climax son llevados al límite episodio tras episodio sin que la trama se vea debilitada, todos los capítulos están bien compensados y se agradece mucho esa frivolidad en la que se descansa un rato mientras nuestros protagonistas se dedican a cazar una mosca .

En esta tercera temporada además se explotan recursos que funcionaron bien, como el de Saul, el excéntrico abogado que tuvo una irrupción absolutamente memorable en la segunda .

Más allá de sus momentos absolutamente deliciosos, tensos y tristes, por encima de todo Breaking Bad es un éxito porque todos sus personajes nos interesan, todos nos parecen humanos y creíbles y pase lo que pase los vamos a acompañar hasta el final.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Película de la semana - The Grey

¿Es The Grey una película de sobremesa de sábado o es algo más? Esa es la pregunta que me asaltaba cuando comencé a leer críticas tan buenas de esta película cuyo poster me hacía pensar en palomitas y explosiones. Llegué leer a un crítico que aseguraba que era la mejor película del año. La mejor película del año, joder. Como siempre he sentido debilidad por Liam Neeson y sus ojillos de lástima decidí que debía verla.


(Crítica con algo de destripe)


La película comienza con un ritmo trepidante, no se anda con tonterías y antes de los veinte minutos hemos asistido a un espectacular accidente de avión, que me recordó a aquel otro maravilloso de "Náufrago". Lo mejor de la película en mi opinión es la primera hora y los últimos tres minutos. Justo después del accidente comprobaremos como el grupo de sobrevivientes se organiza tratando de sobrevivir a la amenaza de los lobos, que Dios santo, jamás imaginé tan temibles. Neeson se erige en el guía de todos ellos y demuestra ser un perfecto conocedor de la psicología del lobo, yo me creo a pies juntillas todo lo que dice pero aún con todo no termino de entender por qué a veces los lobos atacan y a veces no. Raro animal el lobo, o al menos el lobo de la película. En el grupo se nos presentan seres dispares, al principio hay uno de ellos que es exageradamente rebelde y finalmente se hace colaborador de forma exageradamente rápida. A pesar de ello, la película es disfrutable cien por cien y alterna bien los momentos de climax y los de distensión. Después y por decirlo directamente, el ritmo se empantana, asistimos a un baile del que sobradamente conocemos los pasos y cuesta un poco empatizar con el sufrimiento de los personajes, incluso las escenas de acción parecen ya previsibles y huecas. Al final la película trata de decantarse por algo que anteriormente se había planteado muy superficialmente, ¿son los personajes de la película elegidos por Dios para algo o todo responde a un azar caótico? Que al final es la pregunta más importante que puede hacerse un ser humano aunque no en una condición tan extrema claro. Sin embargo, a pesar de ser forzado y algo previsible, el desenlace me pareció lo suficientemente lírico como para ser visto con encanto, es un buen final para una película más que decente.

No, no es la mejor película del año eso seguro, pero sí, es una buena película de sobremesa de sábado, lástima tanta sangre que quizá revuelva algún estómago sensible.

Algunos temas de conversación

Ayer empezó oficialmente la primavera y hoy Madrid amanecía, que no es poco, nevado. Por fin llueve después de un invierno extremadamente seco. Las oposiciones de secundaria no parecen convocar plazas para este año en lengua, la buena noticia es que no tendremos que pasar por un proceso farsa que adjudica cinco plazas entre cinco mil pretendientes. La mala, que todo parece indicar que seguirán los recortes, Bruselas no hace caso a Rajoy, las cuentas no cuadran y la palabra crisis sigue engulliendolo todo. Desde los mass media se vocifera sin ninguna compasión, el miedo sirve para vender: "documéntese de lo que se le viene encima, ponga una tragedia en su widget informativo, no deje de saber que es lo peor que podría ocurrirle".

El Madrid ve recortada su ventaja a ocho puntos con respecto al Barcelona y los periódicos titulan con un "hay liga" las portadas de sus diarios. Dos películas muy polémicas "Extremely loud and incredible close" y "We need to talk about kevin" entran en la cartelera española. Algunos políticos y miembros de la familia real están siendo juzgados por prevaricación y demás cosas acabadas en ción.

El tiempo, el trabajo, la crisis, el fútbol o el cine, estos pequeños quehaceres nos entretienen de la vida, son ideales para compartir con desconocidos o casi, sin mojarse demasiado. Para evitar problemas mejor abstenerse de la política, que suele tomarse muy en serio.

lunes, 19 de marzo de 2012

Ser padre

Quizá esta sea una de las fiestas más justificadas del calendario español. Ser padre en el siglo XXI no es fácil. A mí desde luego me resulta mucho más sencillo ser hijo y quejarme de los errores que cometen los padres que ejercer como tal. Desde que soy padre casi no tengo tiempo para nada, a veces tengo que arañarlo de forma forzada y eso me genera ansiedad, a veces mi hijo no se echa la siesta o está insoportable y tengo que escuchar su llanto que pareciera interminable. Ser padre (y también claro, ser madre) no es nada fácil porque es políticamente incorrecto decir que hay momentos en que es un absoluto coñazo y supongo que más para mi generación que fuimos educados para el placer y la formación intelectual.


Ser padre es también tener una visión mucho más completa de la vida, hay cosas que sólo he podido aprender siéndolo, (del mismo modo en que uno sólo puede conocer sobre el amor enamorándose o sobre la muerte perdiendo a seres queridos). Yo he comenzado a entender porque la gente hace muchas veces lo que hace, porque funcionan mal tantas cosas o porque las personas tienen una fuerza que no se sabe de donde viene. Ser padre es entender que la vida es un ciclo y que la historia es un engaño porque es ese mismo ciclo repetido con circunstancias diferentes.


Lo más curioso de ser padre es que es una de las cosas más ambiguas que existe, porque además de todo lo que dije anteriormente, ser padre es también esa cosa maravillosa de la que habla el tópico, que a veces incluso se queda corto. Es conectar con nuestra niñez antes de que mordiéramos mil veces la manzana y estar en contacto con una persona tan especial que a veces nos impone un profundo respeto. Un ser desvalido y un ser poderoso. A veces, en la noche, miro como duerme mi niño, tiene los carrillos hinchados porque, orgullo de padre, come muy bien. Ahí está él y ahí estoy yo, y pienso que me basta con eso, velarle. Arroparle, acercarle el perrito para que lo abrace o ponerle el chupete que se le cayó, me basta con eso, y ese es otro de los misterios de ser padre, que sentir que mi papel en el mundo ahora mismo se resume en protegerle y hacer que sea lo más feliz posible, y ese sentimiento me llena de plenitud.

viernes, 16 de marzo de 2012

Película de la semana: Untouchable

Esta es una de esas películas amables que tanto gustan a la academia americana. Es la clásica historia de dos personajes que no tienen nada que ver pero que acaban enriqueciendo su vida gracias a su relación. En esta ocasión se trata de un tetrapléjico adinerado y un hombre cuya vida discurre por lo marginal. Uno es esmirriado, apagado y culto y el otro es grande, vital y lleno de conocimientos sobre las personas.



La película tiene grandes virtudes, Omar Shy demuestra porque ha ganado el César desbancando al mismísimo Jean Dujardin de The Artist. El guión es muy inteligente y cosa que no suele ocurrir en este tipo de tramas se prefiere caer en lo sútil antes que en lo explícito, cosa que se agradece mucho. Tiene momentos muy divertidos, resultado de ambas virtudes citadas. Es tierna y no es empalagosa. No es de extrañar que haya contado con las mejores notas en filmaffinity, dentro de las de su especie, es una de las mejores.

miércoles, 14 de marzo de 2012

Game of Thrones

Con los años me estoy haciendo cada vez más friqui. Cada vez me gustan más las películas de superhéroes, los comics y la épica de serie b. Así que según la descargaba tenía la sensación de que me esperaban unas horas de auténtico disfrute viendo Game of Thrones, el último proyecto de HBO que además contaba con un excelente respaldo de la crítica.




Lo cierto que me costó un poco entrar en la serie, tenía la sensación de que estaba asistiendo a una simple culebrón ambientado en una variante de la edad media. Sin embargo, a medida que se sucedían los episodios, iban cobrando fuerza los poderosos elementos misteriosos que el autor de "Canción de hielo y fuego" ha imaginado. Estamos en una tierra dividida en siete reinos, representados en diferentes casas con características propias. Al norte, un descomunal muro trata de contener el posible avance de gigantes y otras criaturas misteriosas tan terribles que prefieren no nombrarse. La guardia de la noche, un cuerpo formado por criminales reclutados a la fuerza se encargan de dicha custodia pero también el bastardo de Stark, el señor de invernalia, nombrado mano del rey para aconsejar a este en la capital del reino. Es en esa capital donde se asiste a la mayor parte de las intrigas y luchas entre los validos y cabecillas de las familias, especialmente la de los Lannister, de cuya casa es la reina y sus dos hermanos muy implicados en esta trama. Por otro lado, más allá del mar angosto tenemos un clan de guerreros muy primarios, que rinden tal culto al caballo que parecen minotauros y cuyo lider se ha emparentado con la bella Targaryen, de la casa de los dragones antes de que estos desapareciesen.




Con el buen guión y la buena dirección artística se consigue que la atención del espectador no decaiga en ningún momento, los personajes están muy bien perfilados y bastante bien interpretados en general, en general casi todos los personajes tienen un pérfil moral bastante bajo, son ambiciosos, lujuriosos o simplemente malos y el bien que aparece bastante desdibujado no consigue imponerse con facilidad, al menos en esta primera temporada. Sin embargo no faltan las conductas heróicas ni los ritos ancestrales y la brujería.

Además es un universo muy primario, está lleno de carne y de sangre, las prostitutas son uno de los motores de esa sociedad y proliferan los hijos bastardos. Abundan las escenas violentas, para mi gusto bastante gratuitas en ocasiones, gargantas rebanas, tajos marcados, bofetadas, amputación de miembros, sangre salpicando por todos lados. Supongo que ese exceso es una forma de ambientar un mundo basado en la pasión y la intuición, en los instintos primarios. Precisamente aquello que el racionalismo trató de contener sin éxito.

Queda muy poquito ya para que empiece la segunda temporada, si alguien no lo ha hecho aún, que no lo dude y se acerque por esta primera.

viernes, 9 de marzo de 2012

Un encerezamiento progresivo y feroz

Quizá Abril sea el mes más cruel, pero para mí Marzo es sin duda el más terrible. La primavera nunca llega tarde a sus citas. Quedarán restos del invierno, las mañanas y las noches frías, el viento del refrán y el agua si Dios quiere y que quiera, pero la primavera es implacable, una vez que se asoma ya no se marcha.

Se deja ver al principio en los prunos y los almendros de la ciudad, esos solitarios especímenes que pueblan parques y avenidas, pero también isletas, recovecos de la M30, árboles a los que no les poníamos nombre por desnudos y que se han de cubrir para desenmarcararse. Luego, poco a poco, amparados en el sol interior, terriblemente hermosos van salpicando los campos, las estribaciones de las sierras, la de Guadarrama y Gredos pero también las pequeñas huertas.
No pueden pasar desapercibidos, son ciruelos, cerezos, abriendo al unísono sus pulposos brotes en armonías rosadas, blancas, casi púrpuras a veces, imposibles, hermosos y terribles.

Vienen a recordarnos que hay vida, pese a las cremalleras con que nos encoge la ciudad mientras imaginamos un futuro torpe. Es la terrible melodía de la primavera, oye lo que dice, cuenta que el invierno está por terminar y con él su engañoso canto de que no estamos muertos, que la vida era esto y ahora no, vienen estos brotes, estas filigranas imposibles, blancas, rosas, que nos delatan mustios y deshojados, terriblemente dormidos.

Película de la Semana: Young Adult

Young adult es la última película de Jason Reitman y segundo trabajo con la guionista Diablo Cody que deslumbró a todo el mundo con su historia en Juno. Young Adult es una de esas películas raras, donde los arquetipos no cuadran como pensamos que lo harían . Su heroína brillantemente interpretada por Charlize Theron es una de esas deslumbrantes reínas del instituto de su pueblo a la que la vida le condujo al amor, al divorcio, a la escritura poco reconocida de novelas para jóvenes, al alcohol y el vacío de la depresión.




Como está tocando fondo decide volver a su pueblo natal a recuperar a su amor de juventud, pero desgraciadamente para ella, éste está felizmente casado y con una niña recién nacida. La heroína, que en realidad no es tal (es antipática, egoísta, frívola y caprichosa) está dibujada con gran acierto en las primeras escenas de la película, luego sin embargo la trama se estanca y entra en un aburrido vacío, del que si se tiene la paciencia de salir, se verá uno recompensado con una antológica y poderosísima escena de gran dramatismo donde Theron está increíble.

La peli es interesante y se nota que tiene el sello Reitman, (que junto con Payne es el gran destripador de la psyque del hombre contemporáneo) sin embargo no disimula demasiado sus errores: las inverosímiles relaciones que tiene la protagonista con su familia y otros personajes y, lo que es más grave, navega demasiado tiempo por un espacio sin sustancia.
No es imprescindible, pero hace un buen apaño.

lunes, 5 de marzo de 2012

La lluvia de los inocentes- Andrés Ibáñez

Los amantes de la literatura que por un casual no conozcan todavía a Andrés Ibáñez no sospechan remótamente lo afortunados que son, los que ya lo conocen estarán contentos de saber que el pasado mes de febrero se publicó su última novela: La lluvia de los inocentes.


Una obra de casi quinientas páginas encerradas en una maravillosa y elegante edición, con un bonito grabado de Ceesepe en la cubierta que anticipa el ambiente ochentero que encontraremos dentro. Galaxia Gutenberg, su nueva editorial, ha abierto una nueva línea que trata de recorrer la veta de jovenes narradores con proyección, y hace como digo un ejercicio editorial notable, entregándonos un volumen compacto, hermoso, gustoso de leer, no en vano Galaxia es una de las mejores editoriales de nuestro mercado.

Aunque es algo irregular en su estructura y no tiene problemas en demorarse por las sugerentes sendas que se le ofrecen a mitad del camino, la lluvia de los inocentes es con mucho, la novela más canónica de su autor. Con un cierto tono biográfico que le acerca en ocasiones al libro de memorias, Ibáñez hace un recorrido que va desde las postrimerías del franquismo, la denominada dictablanda, hasta los felices y anárquicos años 80 en que nuestra democracia comenzaba a consolidarse. Es en ese sentido una novela generacional y la exhaustiva minuciosidad de sus primeros capítulos nos recuerdan al mejor costumbrismo de Manuel Longares en Romanticismo, precisamente donde terminaba esta comienza aquella.




En ese sentido esta novela de Ibáñez tiene algo de realismo decimonónico, un tono absolutamente inhabitual y casi impensable en un autor como él, una novela con tacos y que le dedica cuatro páginas a la cola de Franco, escrita en estilo muy sencillo, a veces sobrio y explicativo pero siempre fresco. Así pues estamos en una novela muy extraña, una novela generacional llena de nocilla, de comic de flash gordon, de niños de Rusia y de lecturas de infancia y juventud. ¿Cómo es posible que la lluvia de los inocentes pueda resultar a pesar de eso una novela tan apetecible? ¿Cómo es posible que sea una de esas novelas que uno literalmente devora con los ojos disfrutando como un niño? Quizá precisamente por su tono que en esa primera parte está perfectamente ajustado a lo que cuenta, se trata de una voz ingenua, no tanto por inocente como por su mirada vírgen sobre el mundo, precisamente esa visión que todos tenemos en la infancia antes de adaptarnos a la explicación de estraza y contrachapado que nos ofrecen padres y profesores. Mateo observa el mundo asombrado ante sus misterios, misterios hechos forma en aquellos años sesenta y comienzos de los setenta. Y en ese mundo de niños está el mundo de los adultos, de los recién venidos de Rusia, de la realidad casposa española del momento, su complejo de inferioridad, sus indisciplinados profesores y la rigidez academicista a la hora de calificar el arte.




Después el tono cambia, llega la adolescencia, el encuentro con la literatura "seria", el malditismo, el existencialismo tan en boga por aquellos años, y que aquí llegaban con retraso. Los años de bachillerato, su relación con la música y la literatura, sobre todo con esta última, los amigos, los amores de adolescencia siempre desdichados. Me he sentido alarmantemente identificado con muchos pasajes, porque ¿Cómo es posible que las cosas hubieran cambiado tan poco dieciséis años después? Los mismos prejuicios, la misma cultura del alcohol y el sufrimiento como pasaje de identificación de la intelectualidad y el arte. El humor tan cándido del principio se hace ahora algo más ácido que en los primeros capítulos, al capítulo mencionado del apéndice del dictador, se une la maravillosa descripción de esos arquetipos tan españoles: El paleto y el Tolilo, que supone un momento antológico de humor del libro y de toda la literatura española. ¿Por qué resulta tan sorprendente hacer literatura de alta calidad y a la vez humor? Esta sorpresa me ha acompañado a lo largo de todo el libro. Algo que tiempo atrás me pasó leyendo Fabulosas narraciones por historias de Antonio Orejudo o Fuegos con limón de Aramburu aunque aquí desde un sarcasmo más hiriente.



Durante toda la novela se nos ofrece un retrato minucioso de los personajes con los que se va encontrando el protagonista, como en la vida de cualquiera algunos tienen un papel importante y otro secundario, pero todos están descritos magistralmente, resultan fascinantes y misteriosos pero sin embargo son indudablemente humanos, son cotidianos y vulgares, son geniales y maravillosos. A veces nos gustaría que se nos contara más sobre ellos, que pasó con el cándido José María y con Miguel, su amigo de siempre. Fabricio y Pedro son personajes enormemente complejos y otros más secundarios como Ines resultan irritantes y al mismo tiempo adorables. Todos forman parte de la baby boom, su falta de compromiso político, su ingenuidad y su desorientación, pero más allá de eso son humanos. La visión del autor sobre sus personajes parte siempre de la ingenuidad y del asombro y eso es algo que yo personalmente no me canso de agradecer.



Para terminar y sin querer desvelar nada de la trama diré que su autor, amante de los escarceos posmodernos no puede evitar meter a Adán y Eva en el corte inglés de Castellana o hacer una hermosísima reflexión sobre la paternidad y la hermandad a partir de un album de geografía humana. Para mí esta es una de las grandes virtudes de Andrés Ibáñez, desde "La música del mundo" y sus hermosísimas teorías que me dejaron fascinado, siempre me ha resultado sorprendente la facilidad que tiene para presentarnos ideas sorprendentes, perfectamente argumentadas pero sobre todo bellas y cristalinas. Se me viene a la cabeza esa explicación de como Europa está unida a través de las campanas de sus campanarios, por citar algo que leí hoy mismo.

Mi episodio favorito es la descripción del parque Flermonde, no sólo porque está escrito de forma alucinante sino porque encierra una idea que aparece como germen en todas las novelas de su autor de alguna u otra forma y sobre todo porque al leerlo se tiene la impresión de que más literatura estamos ante una de esas narraciones mitológicas que trascienden fronteras y épocas.

Todo tiene cabida pues en esta imprescindible "lluvia de los inocentes", el tono confesional, la narración limpia y sencilla de la novela decimonónica, la belleza de sus reflexiones que nos hacen empaparnos de alegría, pero también de tristeza y también de esperanza. Lo elevado y lo bajo, lo evidente y lo esotérico. Estas casi quinientas páginas son sólo un pedacito de lo que su autor nos podía haber mostrado, seguramente ha decidido guardarlo por el momento dentro de su estuche, atado con el viejo bramante, dentro de la alacena más alta del armario y seguramente nos lo vaya entregando lentamente en sus futuros libros.

viernes, 2 de marzo de 2012

Película de la semana: La invención de Hugo

Además de "My week with Marilyn" de la que ya hablé, la otra película de esta semana ha sido Hugo.

Hugo es una película preciosa, maravillosamente ambientada en el Paris de los años 30 y más concretamente en la estación de tren de Montparnasse. Sin embargo la película estuvo rodada en unos estudios en Londrés, y ese, en mi opinión es un gran acierto, porque sus fascinantes decorados dotan a la película de un ambiente onírico que es además el mismo ambiente propio de los orígenes del cine que es uno de los temas de la película.


Hugo está basada en una novela bastante reciente cuyo protagonista vive entre los mecanismos de los relojes de la estación de tren. Si uno viera esta película sin saber de qué director se trata lo más probable es que pensara y posiblemente por este orden es que está viendo una cinta de Tim Burton, (la producción de Jhony Deep acentuaría esta apuesta), si le dijeran que no, pensaría en Spielberg, si le siguieran diciendo que no, dudando diría si no se trata de Jean Pierre Jeunet, o quizá de un realizador francés con talento y con el apoyo de una producción de lujo, si le siguieran diciendo que no, dudaría mucho y empezaría a dar nombres variopintos, pero dudo mucho que terminara diciendo que es una peli de Scorsese.

Creo que el verdadero talento es el que permite a los artistas moverse por terrenos variopintos, y creo que esta película dice mucho y muy bueno de Scorsese.

No quiero destriparla de ninguna manera, así que simplemente citaré alguna de sus virtudes, es una de las mejores películas ambientadas de todos los tiempos, todas sus historias, tanto la principal como las secundarias tienen encanto, se toma el tiempo necesario sin necesidad de aburrir, el vestuario es maravilloso, los niños están genial, tiene uno de esos finales con varios golpes de platillo adicionales que le quedan muy bien, es inteligente, es tierna, es conmovedora. Es una obra maestra.

Quizá el único pero es que le falta algo de profundidad emocional, no comparto sin embargo la crítica de su falta de verosimilitud, creo que forma parte de las reglas internas de la propia película, cuya brújula orientaiva es la inocencia. Ya dije que había sido el año del cine de la ingenuidad y quizá Hugo sea en ese sentido su mejor exponente.